Esta primavera está prevista la inauguración del Museo Automovilístico de Málaga. Se trata de un proyecto para mostrar al público la maravillosa colección de coches antiguos y clásicos de la familia Magalhaes. Lo más sorprendente para nosotros es que en la exposición habrá más sombreros que automóviles: ¡500 sombreros antiguos!
Aunque la aparición del coche supuso un freno al uso del sombrero es indudable su perfecta conjunción. Me viene a la memoria el cloche de paja que expone el Museo del Traje de Madrid y sobre el que escribí en su día: «la velocidad del automovil y el frenesí de los locos años 20 se plasman en el adorno: una cinta de terciopelo cosida en espiral alrededor de todo el cloche».
